Buscando el yagé en el Amazonas colombiano | Revistas

Buscando el yagé en el Amazonas colombiano | Revistas: "Según varios testimonios el bejuco mantiene despierta a la persona y la hoja produce la alucinación o ‘pinta’. 

Guillermo continúa su relato y explica la parte trascendental del rito sagrado.

“El chamán te empieza a orar en su lengua nativa, debes caminar, observar todo a tu alrededor, la selva, el río, los animales, tu cuerpo y luego tomarte el yagé. Primero no vas a sentir nada, pero después vas a caer en un sueño profundo, donde vas a ver todo lo que pasa en tu vida, qué puedes mejorar y qué puedes cambiar; esto si tu corazón y tu alma están bien, si no, puede que tenga un efecto bastante peligroso”.

“Debes creer en ti, nada más”. Para llegar hasta el chamán y jefe del clan Huitoto que allí habita, hay que caminar por la selva unos 10 kilómetros, llevar botas pantaneras, protegerse del sol en caso de que salga y eso si, saber que es territorio sagrado y que todo allí debe ser respetado, hasta el mismo suelo que se está pisando. La choza es enorme y está rodeada de gallinas, chigüiros, plantaciones de plátano y mucho silencio.

El jefe chamán se llama Yunae, tiene 83 años y es el encargado de tomar las decisiones en su clan, transmitirles sabiduría y sobre todo, mantener el equilibrio de todo lo que lo rodea, en base a su conocimiento y entendimiento del mundo.

Yunae ha recorrido el mundo invitado por varias ONG, que lo llevan a universidades e institutos para que muestre la cultura de su pueblo y de los tesoros que esconde el Amazonas, considerado el pulmón del mundo.

“He conocido muchos países como España y Francia, pero me quedo con mi Amazonas, acá estoy en mi hogar y eso es lo que uno tiene en la vida”.

Para Yunae, el yagé es algo normal. Está enterado de lo que hacen en el mundo con una de las tradiciones de sus ancestros.

“Yo sé que mucha gente quiere hacer esto, pero lo que no saben es que su corazón debe estar puro y tranquilo, si no es así no les va a servir, por eso muchos se pierden y hasta mueren, no saben realmente de la riqueza espiritual que esto contiene”.

En medio de la paz inimaginable que se siente en su choza, Yunae escucha la radio mientras explica varias de sus tradiciones y aconseja sobre cómo se debe vivir en paz y en armonía con el mundo. A sus visitas les brinda hoja de coca y tabaco, una combinación muy potente a la que él y su clan ya están acostumbrados, pero para el que no, es una mezcla que estimula todos los sentidos.

“Luego que usted se toma el yagé, debe reposar cinco días y escuchar los cantos de la tribu y los sonidos de la selva, así es que se va encontrar con usted y a ver en su interior. Todo esto es necesario para tener un nuevo comienzo y limpiar su alma (…) lo más importante es creer en el ser supremo y en tus valores, si no lo haces, tu vida no tendrá un destino, esa es tu tarea”."



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